Jamón Ibérico de Campo cortado a mano 80g

Degustación: Jamón de pata fina. Grasa entre dorada y rosácea de consistencia blanda y untuosa. Variación de tonalidades desde rojo intenso hasta rosa pálido, con numerosas infiltraciones de grasa veteada brillante que se funde en el paladar.

Su sabor es suave y delicado, ligeramente dulce en el ataque, sorprendiendo la untuosidad de su grasa fundiéndose en el paladar de forma sublime.
Para un mayor disfrute de las cualidades organolépticas del Jamón, es preferible consumirlo a temperatura ambiente.

El corte se presenta en finas lonchas de 4-5 centímetros de ancho para conseguir así que estas se fundan en la boca, donde se produce una explosión de sabores aromáticos y llenos de matices.

Presentación: Presentamos los sobres de Jamón envasados al vacío en los que cada loncha es cortada a mano y separada una de otra con tiras de plástico para evitar que queden pegadas y facilitar así la colocación en el plato
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Los sobres de jamón envasados al vacío se presentan en una cajita muy elegante que le da un toque de exclusividad y que nos ofrecerá una visión del producto maravillosa. Perfecto para tener un detalle con alguna persona.

Consumo: Un plato de Jamón Ibérico es una delicia demasiado sensible y exquisita como para consumirlo en cualquier lugar, de cualquier manera.

Hemos de tener en cuenta que la temperatura ideal para disfrutar, en su auténtico sabor y textura, de una ración de Jamón Ibérico éste ha de estar entre los 20 y 22º. Esta es la temperatura ideal para que el Chorizo Ibérico sude. Y es que, si la temperatura está por encima, el Chorizo Ibérico no tendrá el sabor que tiene que tener… y, si está por debajo, el aceite oleico no estará en estado líquido y por tanto no potenciará el sabor del mismo modo.

Nuestra recomendación es que el Jamón Ibérico atempere de forma natural y gradualmente. Así disfrutarás más de sus sabores y aromas.

1. Dejar el sobre fuera del frigorífico varias horas para que esté a temperatura ambiente, desde Jamón Appétit recomendamos dejarlo fuera del frigorífico la noche anterior al consumo. Si la temperatura ambiente es muy baja, se puede utilizar un chorro de agua tibia, sin sensación de calor, aplicándolo en la parte trasera, en la lámina.
2. Después abrimos el paquete y lo mantenemos abierto durante unos 15 minutos. De este modo, nuestro Jamón ibérico respirará.
3. Con unas tijeras cortamos el envase de plástico donde vienen nuestros loncheados envasados al vacío, realizando todo el corte alrededor del sobre.
4. Colocar directamente sobre el plato y servir a unos 20 a 22 grados centígrados.
5. Dejar pasar un máximo de 5 minutos antes de servir. En la bolsa y en el producto se verá una grasa fluida, señal inequívoca de que está listo para consumir.